Este fin de semana tuvimos una experiencia extraordinaria. Estuvimos en un lugar que queda en Santa Elena llamado Montevivo, nos invitaron unos amigos muy especiales a dormir en una Maloka (casita donde vivían los indios). Confieso que al principio me dio un poco de susto pues no acostumbro a quedarme en un lugar que aparentemente no sea cómodo, pero la verdad es que el concepto de comodidad es relativo, y al fin de cuentas, la falta de luz artificial o de algunas comodidades cotidianas solo hizo que fuera más divertido.
El lugar en general era hermoso, parecía que uno se metira en el cuento de Caperucita Roja y luego llegara caminando a la casa de Hansel y Gretel….
Cuando llegamos estaba haciendo una tarde hermosa, esta es la Maloka donde dormimos…
Luego de instalarnos en la Maloka, fuimos a recorrer el bosque con los niños. Fue una caminata muy linda y los niños usaron capas para que fuera mucho más mágico….
La entrada al bosque:
Los niños…
En la noche hicimos una fogata y comimos chorizos asados en la fogata con pan, luego no podían faltar los masmelos. También llevamos una calabaza de Halloween y nos divertimos mucho alrededor del fuego..
Al día siguiente nos levantamos temprano, desayunamos y luego hicimos una actividad que se llama «reto aventura» que es pasar una serie de obstáculos que estan en lo alto de los árboles, por medio de habilidades físicas y obviamente bajo estrictas medidas de seguridad. Subimos los niños y las mamás que nos dimos de guapas y creo que nos dio más susto que a los niños… fue demasiado rico!
Mi hijo pequeño en lo alto de los árboles…
Las mamás, con un poco de susto…
Bueno, el fin de semana fue inolvidable, súper recomendado el sitio para ir a pasar el día o el fin de semana, hay muchas cosas ricas por hacer y lo más importante es que es en contacto con la naturaleza, ecologico!!!