La vida es hermosa y yo siempre quise tener muchos hijos (por ahi 5), pero eso del embarazo, parto, posparto, salud, educación y finanzas para tener muchos hijos nos lleva a que no siempre se pueda tener la cantidad enorme de hijos que quisiéramos… Pero digo que la vida es linda porque nos aparecen hijos por ahí que no salieron de nuestra barriga pero que los sentimos casi como propios.
Antes de tener a mi tercer y cuarto hijos, mis sobrinos Jero y Ato, yo tuve oto hijo que es Martín.
Martín es hijo de una prima (para ser exactos prima segunda), que es como una hermana porque prácticamente crecimos juntas. Nos metian juntas a cuanta clase había, junto con mi hermana, su hermano y otra prima y eramos un combo tan horrible que creo que eramos el terror de los profesores de las clases extracurriculares. Me acuerdo todavía (y me río) lo mal que nos manejábamos en las clases, que horror, pobres papás.
Martín nació un año después de mi hijo menor y desde que está muy pequeño, vive metido en mi casa y con mis hijos, son súper amigos, se adoran. Mis hijos lo han ido introduciendo gradualmente en muchas cosas muy precoces para su edad: Super héroes, Star Wars, Armas y todo tipo de muñecos que no se ni pronunciar. Apenas empezando a hablar, Martín nos puso a mi esposo y a mi: «El oto papá» y «La ota mamá» y recuerdo una vez que se lo llevaron de paseo lejos del pais y estaba muy aburrido y le dijo a la mamá: «Me quiero devolver para la casa» y ella le dijo: «Y si los papás se quedan aquí tu que haces?» y el les respondió: «Me recoge la ota mamá y el oto papá». Quien no se derrite con eso!
Yo me muero de amor con Martín, me derrito cuando habla porque habla divino, en esta casa nos encanta que venga y lo invitamos cada que podemos y siempre siempre se va bravo y llorando cuando lo recogen. Es un niño muy especial, chévere, querido, alegre, y amoroso. Sabe que lo adoro porque se lo digo y deja que le de besos y abrazos.
Martín cumplió 4 años y le hice una torta de 3 pisos de súper héroes que me quitó muchas horas en las que le metí todo mi amor para que mi oto hijo disfrutara su cumple como se lo merece y le agradezco a la vida, a Maria y a Andrés por dejarme disfrutar y querer a Martín como si fuera mio.